LA CANÇO DE PAGÉS

Tal vez ustedes no lo recuerdan, pero una vez en la Barcelona cosmopolita, liberal y bilingüe que tanto amamos algunos, Loquillo y los Trogloditas, hartos de la discriminación que sufrían por parte de las emisoras de la Generalitat de Cataluña por cantar en español, compusieron un tema que se llamaba la Canço de Pages. La letra en catalán, que no tenía desperdicio, decía más o menos así:

        Ah si tú vinieses a la Plana de Vic

         te enseñaría todo alrededor

         mientras tú me la estás pelando

La canción que estaba incluida en el disco “Mis Problemas con las mujeres” tenía a la guitarra al gran Francesc Pi de la Serra. Desgraciadamente, el gobierno catalán prohibió la pieza. Y es que no los nacionalistas catalanes que siguen la máxima de mentira bien inventada vale mucho y no cuesta nada, no aman la lengua en la que millones de catalanes se expresan cada día. Ha llovido mucho desde que Sabino Mendez y Loquillo nos regalaran esa joya del rock español. Ahora el Loco vive en San Sebastián, y el letrista de la banda nos sigue obsequiando con colaboraciones musicales y con artículos en los grandes diarios nacionales, demostrando que una tercera España es posible. Un país donde la diversidad es motivo de orgullo, y no de separación. Por eso, el bueno de Sabino ayudó a fundar el partido Ciutadans que tan bien lidera Albert Rivera desde donde se pide que todos los españoles seamos verdaderamente iguales ante la ley, sueño, como ya les he comentado en otras ocasiones, de todos los liberales españoles.

El sueño parece haberse convertido en esta España de las autonomías donde, o se acepta el pacto fiscal o nos impondrán, de facto, la independencia del Principado. El resultado sería catastrófico para los catalanes que pasarían a tener una renta per capita similar al de Chipre. Entre otras cosas porque los catalanes saben que en Cataluña no hay tantos culos para todas las bragas que fabrican, por eso les iría fatal separarse de su mercado natural. Pueda que sea un farol, puede que no, porque con los chicos de Convergencia nunca se sabe. Lo único cierto es que desde Cambó pasando por Tarradellas o Pujol, nadie puede soñar con la independencia sin la mitad de Cataluña. Incluso si se celebrara un referéndum, los independentistas saben que no podrían obtenerla si no llegan a alcanzar un 80% de sufragios favorables. Lo contrario sería partir a la población en dos que, además, debería de elegir entre el amor del padre o de la madre. Y ya saben ustedes como terminan los hijos cuando se les obliga a elegir tras un divorcio consumado.

El gobierno de España debe mantener la cabeza fría y el corazón caliente para no dar la pieza por perdida. Es más, debe volver al verdadero debate que señale las causas que han convertido a Cataluña en un territorio que cierra hospitales y no puede pagar las nóminas. Una ruina que trajo el nacionalismo más radical de ERC con sus socios del tripartito. Es más que probable que escondan sus miserias tras la estelada de los collons ahora que la ola es grande, pero la marea pasará, y la frustración será aún mayor cuando caigan las hojas del calendario, y vean que después de Lituania, Letonia y Estonia, Cataluña no es la nueva Paletonia y el Barça sigue jugando su liga, la española. ¡A Dios gracias!

                                                      Bones botifarres

                                                     tenim nena, tienes que venir

                                                     que en cap altre lloc

                                                     altre lloc d´Espanya

                                                     trobarás millors embotits

Sergio Calle Llorens