ME SIENTO COMO NOÉ

 A veces me siento como Noé completamente rodeado de animales, especialmente hoy que la lluvia cae inmisericorde en mi atalaya mediterránea. Acabo de escapar de la tormenta tras refugiarme en los pinares y escuchar la melodía triste del mar. Pero ni siquiera la tempestad puede borrar las huellas que dejan esos salvajes.

El primer animalito rosado que quiero destacar es J. Sánchez Maldonado- Consejero de Economía, Innovación y Empleo de la Junta- que abrió el curso en la Universidad de Málaga recriminando al gobierno central los recortes y la fuga de estudiantes. Eso sí, no dijo nada de los 103 millones que el gobierno bananero de Andalucía le adeuda a la UMA. Un silencio que han compartido los medios amigos. Grupos de comunicación que también muestran muchas reservas a la hora de hablar de los más de 3000 pacientes de cardiología de dos hospitales malagueños que están sin fecha de revisión. Vaya que muchos morirán del corazón por la mala cabeza de un pueblo chabacano que siempre elige a los mismos patanes como gobernantes.

Pedro Sánchez pide solucionar todo el guirigay autonómico ahondando en la chalaura federalista. Habría que explicarle a este señor que los estados federales nacen de un deseo histórico de unión y, por supuesto, no como en la España autonómica que surgió para fomentar la deslealtad hacia el estado. La marrana propuesta del nuevo líder de la secta del capullo conduciría a una Andalucía independiente en las que papanatas como Sánchez Gordillo y Valderas tendrían mucho que decir. Otro asunto sorprendente es el de escándalo de las tarjetas de la caja madrileña. Sánchez afirma que esa gente no tiene cabida en el PSOE. Ese grupo hispano adonde acuden todos los cleptómanos patrios como bien conocen los andaluces, aunque no sea a través de Canal Sur.

José Antonio Moral Santín de IU fue el que más trincó con la Visa Negra de Cajamadrid- 456.000 euros- dinero que todavía no ha devuelto como Rodrigo Rato. Al parecer al popular le gustaba mucho irse de picos pardos a altas horas de la madrugada.  Ante este desvarío, la marca de izquierdas propone en Andalucía un  banco público para que todos sus dirigentes puedan vivir como los comunistas de Cuba; sin dar palo al agua.

Por su parte los responsables del SAS- servicio andaluz de soplapollas- afirman que no es necesario atender a los enfermos mentales a diario. Por el momento, se desconocen los efectos nocivos de  tener a tanto perturbado por las calles de Andalucía. Lo que sí conocemos, muy a nuestro pesar, es adonde conducen los estropicios meridionales y tarterinescos de los desequilibrados de la bancada del gobierno andaluz.

Creo que todos los animales mencionados en esta entrada se explican porque vivimos en una época donde hasta el más idiota  puede ascender en el arte de crear soluciones sin ningún talento conocido. Mato, o mismísima Leyre Pajín, son el resultado de una forma de entender la vida basada en el gusto por las charcas llenas de barro. Un estilo que ha creado monstruos como Podemos y su peligrosísimo líder Pablo Iglesias. Muchos que acusan al líder bolivariano español de alojarse en lujosos hoteles, no entienden que el problema no es donde se aloje el coletitas, sino el lugar en el que tiene pensado alojarnos  a los que opongamos a su régimen antidemocrático. Cada uno que haga sus  conjeturas, un servidor apuesta por un centro similar a Alcatraz para reeducarnos políticamente hablando a todos los disidentes.

Ya ven hoy puedo entender al mismísimo Noé rodeado de animales de todo pelaje y condición. Alimañas zopencas que nos están llevando a la más absoluta ruina moral y económica. Yo no sé lo que harán ustedes para escapar de lo que viene después de que esta gentuza deje el campo como los caballos de Atila. Yo, en cualquier caso, siempre puedo acceder a la nacionalidad danesa. Mientras me lo pienso, observo esas ermitas dedicadas a la Virgen del Mar cuyas campanas emiten sonidos leves empujadas por el travieso viento de levante. Ese viento que hace tiritar a los marineros y gemir las cuerdas de los barcos.

Sergio Calle Llorens