ZOIDO METE LA PATA

Zoido ha sido atacado por la izquierda sevillana tras comprobar que el Centro Pompidou va a tener una sede en Málaga capital dejando a la ciudad del Guadalquivir con un palmo de narices. Una frustración que se une a la del museo Carmen Thissen cuya titular también prefirió la capital de la Costa del Sol como la ubicación perfecta para exponer su maravillosa colección. El caso es que en esta parte del mediterráneo, la oferta cultural que va desde Picasso, Sorolla o Vang Gogh supone tener 3 millones de turistas en visitas culturales. Unas cifras que con la apertura del Bellas Artes y el Pompidou pueden hasta triplicarse.

Para defenderse, el señor Zoido ha dicho que el resto de ciudades nunca podrán tener lo que tiene Sevilla. Es decir, los ERE, Lopera, Del Nido, Paquirrín, la Duquesa de Alba, Mercasevilla y un sin fin de corruptelas. Una vez más se demuestra que el alcalde sevillano no ha ejercido, ni un segundo, como presidente del partido en la comunidad en la que por primera vez derrotaron a los socialistas. Una actitud que ha hundido al PP en las encuestas y que se da  la mano con los intentos socialistas de dinamitar los proyectos de Málaga.

Zoido vuelve a construir una frontera entre Sevilla y el resto de provincias. Las declaraciones del dirigente popular han sido utilizadas por la indigente intelectual de María Gámez que pide que rectifique. Hubiera sido mucho más positivo que ella, precisamente ella, Marquesa de la Mentira, hubiese retirado el plan socialista para dejar fuera del Corredor Mediterráneo a la capital de la Costa del Sol. Y es que Gámez no pierde ocasión para hacer literalmente el ridículo.

 Afortunadamente, el Alcalde de Málaga ha reaccionado con una actitud elegante diciendo que él siempre se alegrará de todo lo bueno que puedan traer el resto de provincias andaluzas. La única duda es saber si hubiera tenido la misma reacción si las declaraciones las hubiera hecho un alcalde de la secta del capullo.

Yo también quiero lo mejor para todas las provincias del sur porque, como dijo un poeta malagueño, no estamos contra nadie sino por Málaga. En cualquier caso, Zoido debe de estar pensando que hay semanas en las que es mejor no levantarse de la cama. Primero fue su defensa del condenado Del Nido y ahora con su ataque a Málaga. Lo suyo, como lo de tanta gente, se cura viajando aunque tal vez ya sea demasiada tarde para arreglar su ceguera. Y es que defender a un delincuente para, a continuación, insultar a ciudadanos honrados, deja fielmente reflejado al personaje.

Nota para despistados: Me enorgullece declarar que algunos de mis mejores amigos son sevillanos y, por supuesto, les deseo siempre lo mejor. A ellos, y a su Sevilla.

Sergio Calle Llorens