martes, 26 de noviembre de 2013

NEGACIONES SOCIALISTAS

Negaron ser responsables de los GAL. Negaron haber robado el dinero a los huérfanos de la Guardia Civil. Negaron la crisis y acudieron a una cascada de adjetivos curiosos para  ocultar la realidad. Negaron que la UGT fuera una organización criminal. Negaron las únicas políticas para sacar a Andalucía del furgón de cola. Sin embargo todo era cierto. Para que no la turba siga ignorando, siguen con su estrategia que no es otra que hablar de la guerra civil que perdieron por estúpidos y prepotentes. La idea es colocar al enemigo ideológico en la picota. Presentarles como una caterva de fascistas y, ellos, siempre ellos, puedan hacer de apagafuegos del incendio cuando, en realidad, son pirómanos por vocación.

Tanta negación para esconder que son unos auténticos negados con sus políticas fracasadas. Nos dicen que si queremos un futuro, hemos de olvidarnos de su pasado para, a continuación, restregarnos por la cara el de los demás. Se dejan en el tintero que muchos de los suyos fueron franquistas hasta que el Dictador estiró la pata.

El socialismo español siempre niega aunque haya pruebas evidentes de su corrupción y estulticia. Y cuando ya las facturas falsas, los ERE y los maletines falsificados en Asia son abrumadores, se sacan a una candidata de discurso vacío y zangolotino. En realidad, y en lo que a Andalucía se refiere, todo da igual pues en la taifa del sur seguirán votando a los socialistas aunque fuese un mono de Gibraltar el aspirante a la presidencia. Este punto puede sorprender a los extraños a esta comunidad, pero no hay sector de la sociedad andaluza que no esté bajo los tentáculos de la Junta. Los intereses compartidos y la ausencia de la sociedad civil nos conducen hacia el apuntalamiento de un régimen corrupto y podrido hasta las trancas. Si el gobierno socialista cae, millones de allegados de la secta del capullo pierden su empleo. Les hablo de periodistas, delegados, subdelegados, conductores, empresarios afines, comisionistas, sindicalistas y hasta de fulanas y traficantes.

Decía Churchill que el socialismo termina cuando se acaba el dinero de los demás y, puede que tuviera razón. Empero, el socialismo andaluz, caso único en Europa, termina cuando ya no tienes colectivo al que robarle. En Andalucía, Susana Díaz seguirá repartiendo subvenciones a las asociaciones de mujeres, a la Unión General de Trincadores. Lanzará nuevos discursos de limpieza democrática pero serán vacíos. Ya nos prometió luchar contra la corrupción pero evitará dejar caer a los jefes de su sindicato.  La única opción que nos queda es la desobediencia civil.

En definitiva, el socialismo andaluz es una sucesión de negaciones. Lo que ocurre es que algunos recordamos la primera modernización, la segunda, la tercera, la cuarta y aquellas campañas de la Andalucía imparable o al máximo. Todavía hoy siguen negando aquellos esperpentos, con lo bien que le hubiera venido al empleo ese dinero. Pero cuando se destina más pasta al autobombo que a políticas destinadas al bien común, la cosa termina como en el más absoluto de los fracasos. Pues que sigan negando pero que decidan pronto aplicar aquello de los cien años de honradez, porque de momento se desconoce el inicio de tal feliz acontecimiento. Susana Díaz es la nueva cara del socialismo y, por supuesto, la tiene de hormigón armado. Ya ni el ácido lisérgico que toman los plumillas del régimen, les hace ver la realidad en colores, aunque el color verdadero, aunque lo nieguen, es el negro.

Sergio Calle Llorens

4 comentarios:

  1. No se puede decir nada en contra porque está claro que ha sido elegido por el pueblo por mayoría absoluta en elecciones en la segunda vuelta y en ningún momento la ha nombrado ningún dedo travieso. Además, no bajo sospecha por ninguna juez sobre nada y su honradez es cristalina tanto por acción como por omisión. Menos o menos.

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  2. Creo que lo que negaron era haber robado a los huérfanos de la Guardia Civil, aunque la verdad no les hubiera importado robar a los huérfanos de la guerra civil.

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    1. Por robar que no quede. Era una errata que ya está subsanada. Gracias

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