25 AÑOS DE CANAL SUR

Canal Sur cumple 25 castañas en las que no ha parado de darle patadas al diccionario. Dos décadas y media dando una imagen lamentable de los andaluces y, mira que Andalucía no necesita gran cosa para destacar en lo negativo, pero ahí está el ente público para demostrar al mundo que no hay un rincón en el planeta donde se pueda encontrar mayor concentración de incapaces.

Canal Sur está compuesta por un pelotón de patanes cuyo único objetivo es la propaganda política y la difusión de los principios culturales del franquismo; andaluces descerebrados y pobres pero con una gracia que no se puede aguantar. Programas para un público entregado que vive en la inopia más absoluta. El año pasado Andalucía registró el mayor consumo televisivo español (260 minuto al día por persona), lo que viene a ser 94.900 minutos al año. No es de extrañar que no tengan tiempo para leer y, mucho menos, para reflexionar. Su realidad andaluza, imaginen, es aquello que sale en la caja que lleva el calificativo que les define. De momento, nadie en ese abyecto canal ha podido explicar la causa por la que mientras el desempleo ha bajado en toda España, en la taifa del sur sube; ya saben, del pleno empleo al pleno paro.

En la actualidad el director de Canal Sur, Joaquín Durán habla de recortes, caída publicitaria y del déficit, mientras que los sindicatos piden un cambio de gestión y un nuevo Canal 2 de noticias. Ni uno, ni otros entienden que ya tenemos bastante con su Canal Fiesta y sus otros métodos de tortura. Su  tiempo ha pasado, y la Republica Bananera de Andalucía necesita ponerle un candado a su televisión para destinar ese dinero que nos gastamos en su mantenimiento a investigación y educación.

La RTVA debe morir como condición previa para salvar a los andaluces de su propia estupidez. Mandar al paro a esta cofradía de aprovechados que jamás ha dado una primicia en sus años de existencia se me antoja esencial para terminar con la corrupción.  Esos reporteros que dejaron tirados a los funcionarios públicos que luchaban, y luchan, contra el decreto de ordenación del sector público andaluz por la que se integraban como empleados públicos sin pasar prueba alguna; más de 35.000 enchufados según la UGT. Esos periodistas que silenciaron los ERE, que insultaron a la Juez Alaya y que cohabitaron, y con la mejor de sus sonrisas, con la corrupción en la secta del capullo. 25 años, con sus noches y sus días- Sic Semper Tyrannis-

La cuestión no es lo que se debe hacer con Canal Sur, porque eso ya está bastante claro, la cuestión  es cuando y donde le cortamos el cable para que estos arribistas conozcan de primera mano la experiencia del paro. Y el que quiera tele regional, que se la pague de su bolsillo.

¡Ya está bien!

Sergio Calle Llorens