Páginas

domingo, 17 de mayo de 2020

¡EMPOTRADA!


La mujer estaba como la cama; empotrada. Podría afirmar, y de hecho lo afirmo, que la potrilla había tenido mucha potra por haberme conocido en el momento más bajo de su vida para subir, y de inmediato, al cielo más alto. Uno de mis sobrinos, en cambio, no ha gozado de tanta fortuna al haber tenido que entregar en el centro de estudios un trabajo sobre su vida sexual durante el confinamiento. El pobre ha tenido que meter mucha paja que, como saben, es el material que más abunda en los cerebros de Alberto Garzón  y Yolanda Díaz.

 El ministro de consumo, tras despreciar al turismo, va camino de ser nombrado “persona non grata” en todos los municipios turísticos del país.  Por su parte, la titular de la cartera de trabajo hace inspecciones para comprobar si los agricultores españoles tratan a sus trabajadores igual que los negreros a Kunta Kinte en Raíces. Los defensores de la ministra, Garzón no tiene quien le defienda, han puesto el grito en el cielo por las críticas a la chica  que, por cierto, acaba de anunciar que los ERTE se cobrarán el próximo día 10 de junio- 3 meses sin cobrar y subiendo.

Dicen los de la tropa morada que la mujer de nariz aguileña, cuya sombra sobre los juegos del hambre que se avecinan es alargada, es una gestora excelente aunque no aportan ninguna prueba que ratifique tal singular aseveración.  Estos turiferarios primero dan por hecho que en el campo español existe la esclavitud y, a reglón seguido, piden consumir productos salidos de los campos de esos mismos labradores tan degenerados. El chiste se cuenta sólo. Es obvio que la madre naturaleza es una furcia sin escrúpulos- Lo digo porque en verdad lo de esta pandilla de chiripitiflauticos no tiene nombre, aunque los psiquiatras han acuñado uno: locura transitoria. Algún día este tipo de fanatismo llevará el nombre de algún dirigente gubernamental.

Yo no sé cómo acabará toda esta crisis. Sólo puedo decir que tuve suerte de criarme en una casa con una biblioteca decente. Al arrullo de viejas palabras crecí mientras tomaba conciencia crítica. Por eso no puedo apoyar ni al gobierno, ni a los que se manifiestan en su contra blandiendo bandera en mano y sin  respetar la distancia de seguridad.  Así que mucho me temo que voy a seguir en Fase 0 para poder ser yo el que siga empotrando, y no acabar empotrado en un nicho de imposible salida.

Sergio Calle Llorens

2 comentarios: